La
música forma parte de la historia del hombre desde los albores de su
imaginación. Hacer ruido con un raspador de marfil intentando
crear ritmo antes de iniciar la caza del mamut pudo ser uno de los
primeros compases que la música diese.
Al
salir a correr, hacer la comida o estudiando ponemos la canción que
más se identifique con nosotros, la que necesitemos en ese momento.
Pero si seguimos siendo los mismos a la hora de trabajar o vender, ¿por qué no llevar este aspecto de nuestra personalidad a
nuestra vida laboral?.
En
publicidad se llama “Jingle”, una canción que identifica al
producto o marca con un mensaje. Recordamos uno de los más famosos
de los años 70, el de “I'd
Like to Teach the World to Sing (In Perfect Harmony)” de Billy
Davis para Coca Cola. Se emitía un mensaje de paz al mundo con una
coca cola en la mano. No es que la refrescante bebida nos trajera
“paz y amor” pero su producto se mimetizaba con el mensaje en un
época convulsa.
Todos
tenemos la “banda sonora de nuestra vida” y nuestra empresa
también. No es demasiado costoso recrear nuestro propio jingle, pero
tal vez no consiga transmitir lo que si haría un cantautor o grupo
profesional (pagando derechos, claro). Pensemos en nuestro grupo
favorito, en el cantante que nos acompañó en los momentos fáciles
y difíciles. Forma parte de nuestra biografía, de
lo que hacemos a diario y por defecto, de nuestra actividad
empresarial.
Elegir
la canción o estilo musical que más comulgue con nuestra filosofía
empresarial es fácil: tu eres tu filosofía empresarial; ¿qué
música te hace vibrar?. No olvidemos que nuestra empresa somos
nosotros, el reflejo de nuestro crecimiento como emprendedor. Sería genial entrar en un bufete de abogados al ritmo de Queen. Que
sucede, ¿que por trabajar (en un volumen adecuado) al ritmo de
“Radio Ga Ga” no son serios?. Simplemente nos enseñan un
aspecto de su personalidad que ellos eligen compartir y que forma parte de su trabajo.
Ya
sea Jazz, rock, blues o flamenco, la música nos puede ayudar a
transmitir nuestros objetivos y motivaciones empresariales de forma
más directa y emocional.